EL SILENCIO QUE GUARDA, es producto de la cordura que lleva
desde la juventud.
Reflexivo, meditabundo, pausado. La actitud conjuga con su
rostro que proyecta paz, tranquilidad.
En cada respuesta, ronda la prudencia y la sensatez.
Despide la imagen de ser distraído, pero en realidad está
envuelto de un bagaje donde la meditación es parte de la conducta.
Pareciera un monje en el retiro espiritual. No lo es, pero
tampoco está alejado de esa condición.
En...