25 de Agosto de 1920
Francisco Villa en Canutillo.
Hoy llega a la hacienda de Canutillo
el General Francisco Villa y se entrevista con el comandante del Distrito de
Parral, coronel Enrique León Ruiz, quien le da la bienvenida ofreciéndole toda
clase de garantías.
El itinerario del
General Villa desde Sabinas fue San Pedro de las Colonias, Cuatro Ciénegas,
donde el pueblo se volcó para vitorearlo; Tlahualilo, ya en el Estado de
Durango, y donde el General Villa licenció a toda su tropa disolviéndose así,
en forma definitiva, el Ejército Villista, siguiendo a Torreón, Parral y
finalmente Canutillo, donde posteriormente recibiría en forma oficial la
hacienda de parte del general Eugenio Martínez y su secretario Víctores Prieto
y como testigo el general José Gonzalo Escobar, quien no disimulaba su
admiración por el General Villa y a quien solicitó una fotografía juntos.
La Hacienda de
Canutillo fue comprada por el gobierno a las señoritas Jurado en algo más de quinientos
mil pesos. El gobierno expidió
escrituras a nombre del General Villa, firmando el acta notarial el entonces
Procurador de Justicia, licenciado Eduardo Neri, en nombre del gobierno.
A pesar de todo el
gobierno ha resultado beneficiado política y económicamente, pues en la campaña
contra Villa el gobierno gastaba millones de pesos y el gobierno de Carranza
perdió más de cuarenta y dos mil hombres.
Finalmente el día 31
de agosto, se hace público un manifiesto
llamado “Manifiesto de Tlahualilo” y fechado en agosto 13 con la firma de todos
los oficiales villistas donde se asientan las bases de su licenciamiento y el
reconocimiento al “Plan de Agua Prieta” y al gobierno emanado de él,
comprometiéndose a no tomar las armas salvo en el caso de una intervención
extranjera.
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