28 de Junio de 1967
Finaliza el segundo Imperio y se
restaura la República
Con la ocupación de la ciudad de México y el puerto de
Veracruz, último bastiòn de los imperialistas, el orden republicano estaba
restablecido, y de la aventura imperialista, sólo quedaban una desgraciada
princesa, sepultada en las sombras de la demencia, y un pobre cuerpo
acribillado de balas, devuelto a aquella patria, de la que había salido
resplandeciente de juventud, jamás el atentado contra el derecho de las
nacionalidades había sido tan pronta y terriblemente castigado. La intervención francesa tuvo trascendencia
inmensa para el porvenir del país; pues dio por resultado su unificación en un
sentimiento nacional de independencia.
Las pèrdidas
materiales de México eran enormes. Mas
de sesenta y tres mil hombres habían perecido en la contienda, y por millares
también se contaban los heridos; muchas fortunas habían desaparecido pero se
habían salvado la independencia nacional y la forma de gobierno republicano, y
el pueblo había salido mejor templado de aquella prueba y con la conciencia de
su valer. Era el principio de una
sociedad nueva y de regeneración nacional.
Desde el punto de
vista internacional, no fueron menos importantes las consecuencias de la
intervención extranjera. Quedò reconocida
la trascendencia de la Doctrina Monroe, presumìan los gringos; se mostró la
solidaridad americana, ya que todos los países del nuevo mundo pusieron de
manifiesto sus simpatías por México, y nuestra patria ya no fue tratada
despectivamente por los países europeos.
Además la guerra con México, preparò el desastre francés de 1870 a manos
de los ejércitos prusianos, con la consecuente caída de Napoleòn III el
pequeño. Su aventura en México había
costado a Francia más de novecientos millones de francos, la desorganización de
su ejército y la pérdida de varias decenas de miles de vidas.
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